El.jueves ya nos contaba que iba a hacer el bizcocho, ¡vaya pinta!
Tenía tan buena pinta nada más llegar algunos ya querían comerlo, menos mal que les concenvencí de que si le comíanos tan pronto igual no nos quedaban fuerzas para cuando fuéramos al parque...
Pero hubo unos ratoncitos que aún así le empezaron.
¡Ay qué besos!
Estaba delicioso.
Y al final de la mañana vino mamá a leer Un Libro.
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