Nos gusta ir a la Viesca, es un pequeño bosque donde siempre lo pasamos muy bien.

Sabemos que llegamos cuando vemos los árboles, escuchamos el río y pasamos por el puente colgante.

Esta vez íbamos a observar árboles y a coger hojas para nuestro Libro de los árboles.

OBSERVACIÓN DE ÁRBOLES: IGUALES Y DIFERENTES.

Por equipos escogían un árbol muy distinto al anterior y le dibujábamos.

El equipo rojo escogió este árbol larguísimo.

 

El equipo verde eligió este árbol con hojas y cuyas ramas nacen muy abajo.

El equipo amarillo nos llevó por un camino muy difícil y encontró este árbol caído (y con un poco de musgo):

 

 

El equipo azul eligió un árbol que también estaba muerto pero que además tenía cortada una rama y en el que las yemas estaban echando pequeñas hojitas. 

 

 

TOMAMOS EL ALMUERZO:

 

¡Cómo se ha puesto Brallan la cara! ¡Vaya bigote!

Lucas le indica por dónde limpiarse hasta que no le queda ni un poquito de yogur.

Martín aprovecha para usar su esterilla. 

Todos juegan un poquito: trepan, sube-bajan, y hacen construcción tan bonita.

COGEMOS HOJAS Y BUSCAMOS DE QUÉ ÁRBOL PUEDEN SER:

 

Paseamos en busca de hojas, mirando qué forma tiene el árbol y metiéndolas en la cestita. Llevamos un diccionario-libro de hoja-árbol-nombre que hemos hecho a partir del libro que trajo Julia de la Viesca.

 

Nos encontramos este árbol-bebé y vemos muchas yemas echando sus hojitas. 

¡Está empezando la primavera y este avellano se está preparando para dar las avellanas!

El libro de Natalia explicaba muy bien estos ciclos.

Y CON UN POCO DE PENA VOLVEMOS AL COLE:

 

¡LO HEMOS PASADO MUY BIEN Y

 HEMOS APRENDIDO MUCHAS COSAS SOBRE LOS ÁRBOLES!